Las chirimoyas tienen el inconveniente que no se conservan durante mucho tiempo y que requieren de una manipulación muy cuidadosa.
Conviene consumirlas cuando están completamente, lo cual se consigue a los 5-6 días de su recolección, cuando se las mantiene a temperatura ambiente, sobre una superficie no muy fría, preferible en cesta de cáñamo o una madera ligera.
HARINA:
Para conservar la harina en buen estado hay que tener en cuenta algunas cosas.
- Vigilar la humedad de la zona: este es el mayor peligro, la humedad hace que se altere el gluten y el almidón, que la harina fermente y se endurezca.
- Tener cuidado con las plagas, larvas, gusanos, cucarachas, etc. Para ello siempre hay que mantener la harina metida en sacos, no muy juntos y sobre tarimas de madera.
- Al aumentar la temperatura, hay que ventilar las harinas, cambiándolas de lugar, el calor favorece el enranciamiento de las grasas, formándose ácidos largos de cadena corta responsables del mal olor y sabor.
MANTEQUILLA:
Para conservar la mantequilla en buen estado:- Conserve la mantequilla en su envoltura o protección original hasta que esté a punto de usarla.
- La mantequilla también se puede congelar, de modo que a sí se conservará bien durante meses
- Para que se pueda untar fácilmente, retírela del refrigerador unos diez minutos antes de usarla.
AZÚCAR:
Para conservarla en excelentes condiciones para su uso, debemos hacerlo en un lugar fresco, seco y en recipientes herméticamente cerrados. Si lo hacemos de esta forma, el azúcar durará seca y suave hasta el momento en que la usemos.
0 comentarios:
Publicar un comentario